• Centro Sanitario Autorizado nº CS19965 - Saber más

Archivos Mensuales :

febrero 2024

Afrontando la Ruptura de Pareja: Cómo Superar el Dolor y Comenzar de Nuevo
Ruptura de pareja: cómo superar el dolor y comenzar de nuevo 800 800 Sandra Ribeiro

Ruptura de pareja: cómo superar el dolor y comenzar de nuevo

En la travesía de la vida, las relaciones pueden llegar a su fin, dejando un rastro de emociones complejas y desafíos difíciles. La ruptura de pareja es un camino que muchas personas enfrentan en algún momento de sus vidas, y aunque puede ser doloroso y abrumador, también puede ser una oportunidad para el crecimiento personal y el redescubrimiento de uno mismo.

En este artículo, exploraremos los pasos y estrategias para afrontar una ruptura de pareja de manera saludable y constructiva. Desde el proceso de sanar el corazón roto hasta el inicio de una nueva etapa llena de posibilidades, te guiaremos en este viaje de autodescubrimiento y renovación. Si estás pasando por una separación o conoces a alguien que lo esté, sigue leyendo para obtener herramientas valiosas que te ayudarán a superar el dolor y encontrar el camino hacia un nuevo comienzo.

Entender y aceptar tus emociones

La ruptura de pareja puede ser un torbellino emocional. Desde la tristeza y la ira hasta la confusión y el miedo, es normal experimentar una amplia gama de sentimientos después de una separación. El primer paso para superar este difícil momento es permitirte sentir esas emociones y reconocer que son una respuesta natural ante la pérdida.

Identifica tus emociones: Tómate un tiempo para explorar lo que estás sintiendo. Pregúntate a ti mismo/a: ¿Siento tristeza? ¿Ira? ¿Alivio? ¿Confusión? Reconocer tus emociones te ayuda a comprender mejor lo que estás experimentando y a evitar reprimir tus sentimientos.

Permítete sentir: No te juzgues por lo que sientes. La tristeza y el dolor son parte del proceso de sanación. Permítete llorar, sentir rabia o cualquier otra emoción que surja. Ignorar o reprimir tus sentimientos solo puede prolongar el proceso de recuperación.

Evita la comparación: Cada persona vive el duelo de manera única. Es posible que veas a otros que parecen estar bien después de una ruptura, pero recuerda que todos tienen su propio camino de sanación. No te compares ni te sientas presionado/a para «superarlo» rápidamente.

Busca apoyo emocional: Hablar sobre tus emociones con amigos cercanos, familiares o un profesional de la salud mental puede ser muy beneficioso. Compartir lo que sientes te ayuda a procesar tus emociones y sentirte comprendido/a.

Cultiva la autocompasión: Trata de hablar contigo mismo/a con la misma amabilidad y comprensión que lo harías con un amigo que está pasando por un momento difícil. La autocompasión te ayuda a reducir la autocrítica y a construir una relación positiva contigo mismo/a.

Recuerda que es normal sentirte abrumado/a por tus emociones durante una ruptura. Darte el espacio y la comprensión que necesitas para procesar tus sentimientos es esencial para sanar y avanzar. No te apresures a sentirte mejor; en su lugar, concéntrate en entender y aceptar tus emociones mientras trabajas en tu camino hacia la recuperación.

En los siguientes puntos, exploraremos cómo sanar en tu propio tiempo, reconstruir tu identidad y autoestima, y finalmente, cómo comenzar a construir un nuevo capítulo en tu vida. Si necesitas apoyo adicional en este proceso, no dudes en buscar la guía de un profesional de la salud mental.

 

Sanar en tu propio tiempo

La recuperación después de una ruptura de pareja no tiene un calendario predefinido. Cada persona tiene su propio ritmo de sanación, y es importante respetar ese proceso individual. Aquí hay algunas pautas para ayudarte a sanar en tu propio tiempo:

Siente tus altibajos: Durante la fase de recuperación, es normal experimentar altibajos emocionales. Puede haber días en los que te sientas mejor y otros en los que el dolor sea más intenso. Aceptar estas fluctuaciones como parte del proceso te permite dar espacio a tus emociones sin juzgarte.

Evita la prisa: Puede ser tentador tratar de acelerar el proceso de recuperación, pero es esencial permitirte sentir y sanar a tu propio ritmo. No te fuerces a «superarlo» rápidamente; en su lugar, dale tiempo a tu corazón para sanar de manera genuina.

Cuida de ti mismo/a: Durante este período, el autocuidado es esencial. Presta atención a tus necesidades físicas, emocionales y mentales. Come de manera saludable, haz ejercicio, duerme lo suficiente y realiza actividades que te brinden placer y calma.

Establece límites: Si bien es importante permitirte sentir tus emociones, también es fundamental establecer límites cuando sea necesario. Si ciertas situaciones o personas te generan dolor adicional, considera dar un paso atrás y proteger tu bienestar emocional.

Busca distracciones saludables: Participa en actividades que te gusten y te distraigan de los pensamientos negativos. Esto podría ser leer un libro, practicar un hobby, ver una película o salir con amigos. Mantén un equilibrio entre el tiempo para sentir y el tiempo para recargar energías.

Celebra los pequeños logros: A medida que avanzas en tu proceso de recuperación, celebra los pequeños logros que vayas alcanzando. Reconocer tu progreso te recordará que estás avanzando hacia una vida más saludable y feliz.

Recuerda que no hay un camino lineal hacia la recuperación después de una ruptura. Puede haber momentos en los que te sientas estancado/a o retrocediendo, pero cada paso que das es parte de tu viaje hacia la sanación. A medida que avanzas en el proceso de recuperación, estarás más cerca de encontrar la paz interior y el equilibrio emocional que necesitas para comenzar de nuevo.

Reconstruir tu identidad y autoestima

Después de una ruptura de pareja, es normal sentirte desorientado/a y cuestionar quién eres sin esa relación. La buena noticia es que este momento puede ser una oportunidad para redescubrirte y fortalecer tu autoestima. Aquí hay algunos pasos para ayudarte en el proceso de reconstruir tu identidad y autoestima:

Reconoce tus cualidades: Tómate un tiempo para reflexionar sobre tus propias cualidades y logros. Haz una lista de tus fortalezas y habilidades, y recuerda que eres una persona valiosa e importante más allá de tu relación pasada.

Explora nuevos intereses: Aprovecha este momento para explorar actividades que siempre quisiste probar o para retomar pasatiempos que hayas dejado de lado. Descubrir nuevas pasiones puede ayudarte a conectarte contigo mismo/a y a desarrollar una mayor confianza.

Establece metas personales: Definir metas personales y profesionales te dará un sentido de propósito y dirección. Puede ser aprender algo nuevo, mejorar en tu carrera o lograr objetivos de bienestar. Estas metas te ayudarán a sentirte empoderado/a y enfocado/a en el futuro.

Redefine tus valores: Reflexiona sobre tus valores y lo que es importante para ti en la vida. Esto te ayudará a tomar decisiones alineadas con tus creencias y a construir una vida que sea auténtica y significativa para ti.

Cuida de tu salud emocional: Practica la autocompasión y el autocuidado. Trátate a ti mismo/a con amabilidad y gentileza, tal como lo harías con un amigo cercano. Esto fortalecerá tu autoestima y te ayudará a enfrentar los momentos difíciles.

Construye una red de apoyo: Mantén y fortalece tus conexiones con amigos y familiares que te brindan apoyo emocional. Tener un sistema de apoyo sólido te ayudará a sentirte acompañado/a y comprendido/a en este proceso de reconstrucción.

Reconstruir tu identidad y autoestima es un proceso que lleva tiempo y autodisciplina. A medida que te sumerges en esta jornada de autodescubrimiento, recuerda que estás trabajando en construir una base sólida para un futuro más saludable y feliz. La relación contigo mismo/a es fundamental, y cuanto más te valores y te cuides, más capaz estarás de construir relaciones significativas y equilibradas en el futuro.

Aprender de la experiencia y abrirse a nuevas oportunidades

La ruptura de pareja puede ser un catalizador para el crecimiento personal y la expansión. A medida que trabajas en reconstruir tu identidad y autoestima, también es fundamental aprender de la experiencia y abrirte a nuevas oportunidades emocionales. Aquí te presento algunos pasos que pueden ayudarte en este proceso de aprendizaje y apertura:

Revisa la relación de manera objetiva: Tómate un tiempo para reflexionar sobre la relación y la ruptura de manera objetiva. Identifica lo que funcionó y lo que no, así como las lecciones que has aprendido. Esto te permitirá tener una perspectiva más equilibrada y evita idealizar la relación pasada.

Enfrenta las emociones difíciles: Aceptar y procesar las emociones asociadas con la ruptura es fundamental para sanar. Permítete sentir el dolor, la tristeza y la ira, pero también busca formas saludables de liberar estas emociones, como escribir en un diario, practicar ejercicio o hablar con un amigo de confianza.

Visualiza un futuro positivo: Imagina cómo deseas que sea tu vida en el futuro. Define tus metas y sueños personales, profesionales y emocionales. Tener una visión clara te ayudará a dirigir tus acciones hacia un futuro más brillante.

Abre tu corazón a nuevas relaciones: Aunque puede ser difícil, estar abierto/a a nuevas relaciones y conexiones es esencial para seguir adelante. No cierres la puerta al amor y la amistad por miedo a sufrir de nuevo. Cada relación es única y te brinda la oportunidad de crecer y aprender.

Aprende a confiar nuevamente: La confianza puede ser un desafío después de una ruptura, pero es esencial para cualquier relación saludable. Trabaja en perdonarte a ti mismo/a y en desarrollar la capacidad de confiar gradualmente en otras personas.

Busca apoyo profesional si es necesario: Si sientes que estás luchando para superar el dolor de la ruptura y enfrentarte a nuevas oportunidades, considera buscar el apoyo de un terapeuta. Un profesional de la salud mental puede guiarte en este proceso y brindarte herramientas para fortalecer tu bienestar emocional.

Recuerda que la vida después de una ruptura de pareja puede ser un viaje desafiante, pero también es una oportunidad para crecer, aprender y descubrir tu propia fuerza interior. Al aprender de la experiencia y abrirte a nuevas oportunidades, estás construyendo un camino hacia un futuro más brillante y emocionalmente satisfactorio.

 

 

Estamos aquí para ayudarte

Rellena nuestro formulario

Para mantenerte informado/a de todos nuestros artículos, síguenos en Instagram.

Isabel López Carregado

Psicóloga General Sanitaria (M-04868)

                              Especialista en Psicopedagogía y Experta certificada en Psicología Forense.

Experta-Especialista en Psicoterapia Emocional Sistémica Adultos, Pareja y Familia.

Ansiedad
Ansiedad: Comprender, Identificar y Tratar 800 800 Sandra Ribeiro

Ansiedad: Comprender, Identificar y Tratar

La ansiedad es una emoción normal en la vida de las personas y vital para nuestra supervivencia. Es esa chispa de alerta que nos prepara para enfrentar situaciones desafiantes. Sin embargo, cuando esta emoción se vuelve crónica o abrumadora, puede convertirse en un problema de salud mental que requiere atención especializada. En este artículo, exploraremos qué es, cómo identificarla cuando se convierte en un problema y el valioso papel que juega la terapia en su tratamiento.

¿Qué es la ansiedad?

La ansiedad es una respuesta natural al estrés y una emoción que todos experimentamos en algún momento. Puede manifestarse como preocupación, nerviosismo o miedo ante situaciones desconocidas o amenazantes. Tiene una función adaptativa, ayudándonos a estar alerta y listos para afrontar desafíos.

Sin embargo, cuando la ansiedad se vuelve constante o se dispara sin un peligro real presente, puede ser un signo de un trastorno de ansiedad. Estos trastornos pueden variar desde el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de pánico hasta el trastorno obsesivo-compulsivo. Son más que simples preocupaciones; interfieren significativamente en la vida cotidiana y pueden causar angustia significativa.

Identificando la ansiedad problemática

Identificar la ansiedad problemática puede ser un desafío, ya que los síntomas varían de persona a persona. Sin embargo, hay algunas señales comunes a las que debemos prestar atención:

  • Preocupación excesiva: si te encuentras preocupándote en exceso, más allá de lo que parece razonable o experimentando un constante estado de alerta, esto podría ser un signo de ansiedad.
  • Síntomas físicos: la ansiedad puede manifestarse en síntomas físicos como sudoración, palpitaciones, temblores o tensión muscular.
  • Miedos irracionales: el desarrollo de miedos intensos e irracionales, como el miedo a volar o a espacios cerrados, puede ser un indicador de ansiedad y debe ser valorado por un especialista.
  • Comportamientos evitativos: evitar situaciones o actividades debido a la ansiedad es otro signo claro que debemos estar atentos/as.
  • Dificultad para concentrarse: si la ansiedad interfiere con tu capacidad para concentrarte en el trabajo, en la escuela o en las tareas diarias, es un indicador de un posible problema y se recomienda buscar un especialista.

El Papel de la terapia

La terapia ha demostrado ser altamente efectiva en el tratamiento de los trastornos de ansiedad. Los/as psicólogos/as trabajan en estrecha colaboración con los individuos para comprender los patrones de pensamiento y comportamiento que contribuyen a esta emoción y desarrollar estrategias para abordarla.

A través de la terapia, las personas pueden aprender a:

  • Identificar y desafiar pensamientos negativos y distorsionados.
  • Desarrollar habilidades de afrontamiento efectivas.
  • Exponerse gradualmente a situaciones que causan ansiedad, lo que ayuda a reducir el miedo.
  • Aprender técnicas de relajación y mindfulness.

La terapia proporciona un espacio seguro para explorar las causas subyacentes de la ansiedad y desarrollar herramientas para manejarla. Lo ideal es personalizar el tratamiento de acuerdo con las necesidades específicas de cada persona.

La ansiedad, cuando es disfuncional, es un trastorno tratable, y buscar ayuda es el primer paso hacia la recuperación. Si tú o alguien que conoces está lidiando con ello, considera hablar con un profesional de la salud mental. La terapia puede ser una vía eficaz para recuperar el control y vivir una vida más plena y tranquila.

 

 

Estamos aquí para ayudarte

Pide cita:

Rellena nuestro formulario

Para mantenerte informado/a de todos nuestros artículos, síguenos en Instagram.

Sandra Ribeiro

Psicóloga General Sanitaria (M-34885)

Profesora del Dpto. de Psicología de la Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos de la UNED

Profesora del Máster en Psicología General Sanitaria de la Universidad Villanueva

Responsable de formación y supervisora de casos clínicos en el Servicio de Psicología Aplicada (SPA) de la UNED

 

Día de San Valentin
Desidealizando el Día de San Valentín: celebrando el amor propio 800 800 Sandra Ribeiro

Desidealizando el Día de San Valentín: celebrando el amor propio

Cada año, el 14 de febrero, millones de personas en todo el mundo se sumergen en un torbellino de chocolates, flores y tarjetas de amor en celebración del Día de San Valentín. Sin embargo, detrás de la fachada de romance y afecto, yace una oportunidad aún más valiosa: el amor propio.

En lugar de idealizar la búsqueda del amor externo, ¿por qué no celebrar el amor hacia uno mismo? El Día de San Valentín puede ser una ocasión perfecta, además de todos los días del año, para reflexionar sobre nuestra relación más importante: la que tenemos con nosotros mismos.

Rechazando los estereotipos románticos

El bombardeo constante de imágenes románticas en películas, música, publicidad y anuncios de regalos puede crear expectativas poco realistas sobre el amor y la felicidad. La realidad es que el amor propio es fundamental para construir relaciones saludables y satisfactorias. En lugar de esperar que alguien más nos complete, debemos aprender a encontrarnos completos por nosotros mismos.

La influencia del amor romántico en el Día de San Valentín: una reflexión crítica

El Día de San Valentín, en su forma actual, está profundamente arraigado en la idealización del amor romántico, la celebración de este día a menudo gira en torno a la expresión de afecto hacia una pareja romántica.

El amor romántico, tal como se retrata en la cultura popular, puede ser descrito como una narrativa poderosa que enfatiza la búsqueda del «amor verdadero» y la creencia en que una relación romántica satisfactoria es la clave para la felicidad y la realización personal. Sin embargo, esta idealización puede tener consecuencias perjudiciales, ya que establece estándares poco realistas y alimenta expectativas poco saludables sobre el amor y las relaciones.

En el contexto del Día de San Valentín, la presión social para demostrar amor a través de gestos grandiosos puede intensificar aún más estas expectativas irreales. Además, la comercialización del Día de San Valentín a menudo promueve una visión estereotipada del amor romántico, que puede excluir a aquellos que no están en relaciones románticas o que tienen diferentes formas de expresar el amor. Esto puede dejar a muchas personas sintiéndose excluidas o incompletas si no tienen una pareja romántica en este día.

Es importante cuestionar y desafiar estas narrativas idealizadas del amor romántico, especialmente en el contexto del Día de San Valentín. En lugar de perpetuar la creencia de que el amor romántico es la única forma válida de amor, podemos celebrar y valorar una gama más amplia de relaciones y formas de amor. Esto incluye el amor familiar, el amor hacia los amigos y, lo más importante, el amor hacia uno mismo.

Al desafiar la influencia del amor romántico en el Día de San Valentín, podemos transformar esta celebración en una ocasión más inclusiva y significativa. En lugar de enfocarnos exclusivamente en las relaciones románticas, podemos celebrar el amor en todas sus formas y practicar el amor propio como una expresión fundamental de cuidado y respeto hacia nosotros mismos.

Cultivando el amor propio

Es importante decir que el amor propio no es egoísmo (mucha gente lo confunde); es una necesidad básica para el bienestar emocional y mental. Cultivar el amor propio implica practicar la autocompasión, el autocuidado y el respeto por uno mismo. Esto puede incluir tomarse tiempo para actividades que nos traen alegría y disfrute, establecer límites saludables en nuestras relaciones y practicar el perdón tanto hacia los demás como hacia nosotros mismos.

Celebrando el Día del Amor Propio

En lugar de centrarse en encontrar la pareja perfecta o en ser inundado de regalos materiales, el Día del Amor Propio puede ser una oportunidad para practicar la gratitud hacia nosotros mismos. Podemos dedicar el día a actividades que nos nutran emocionalmente, como meditar, dar un paseo, escribir en un diario de gratitud o simplemente disfrutar de nuestra propia compañía.

Absolutamente, esa frase encapsula perfectamente la importancia del amor propio en el contexto de las relaciones románticas. Aquí está una sección que profundiza en esa idea:

La importancia del amor propio en las relaciones de pareja

La idea de que para ser felices en pareja primero debemos ser felices con nosotros mismos es más que una simple frase de autoayuda; es un principio fundamental en la construcción de relaciones saludables y satisfactorias. Cuando nos sentimos personas completas y satisfechas en nuestro propio ser, podemos entrar en una relación desde un lugar de plenitud en lugar de necesidad. Esto nos permite ofrecer amor y apoyo genuinos a nuestra pareja, en lugar de buscar que nos llenen los vacíos emocionales que no hemos abordado por nuestra cuenta.

El amor propio actúa como una base sólida sobre la cual construir una relación romántica sólida y duradera. Cuando nos amamos y valoramos a nosotros mismos, establecemos estándares saludables para nuestras relaciones y nos sentimos personas dignas de recibir amor y respeto en igual medida. Esto nos permite establecer límites claros, comunicar nuestras necesidades de manera efectiva y tomar decisiones que estén alineadas con nuestro propio bienestar.

Además, el amor propio nos proporciona la capacidad de ser personas más compasivas y empáticas hacia nuestra pareja. Cuando estamos en paz con nosotros mismos, somos menos propensos a proyectar nuestras inseguridades o expectativas no cumplidas sobre nuestra pareja, y más capaces de aceptarlas tal como son. Esto crea un ambiente de confianza y apoyo mutuo en la relación, donde ambas partes se sienten libres para ser auténticas y vulnerables.

Es importante recordar que el amor propio no es un destino final, sino un viaje continuo de autodescubrimiento y crecimiento personal. Cultivar el amor propio requiere práctica y dedicación constante, pero los beneficios que aporta a nuestras relaciones de pareja y a nuestra vida en general son invaluables. 

 

 

Estamos aquí para ayudarte

Pide cita:

Rellena nuestro formulario

Para mantenerte informado/a de todos nuestros artículos, síguenos en Instagram.

Sandra Ribeiro

Psicóloga General Sanitaria (M-34885)

Profesora del Dpto. de Psicología de la Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos de la UNED

Profesora del Máster en Psicología General Sanitaria de la Universidad Villanueva

Responsable de formación y supervisora de casos clínicos en el Servicio de Psicología Aplicada (SPA) de la UNED

Pide cita

Pedir-cita
¿Cuándo prefieres tener tu cita?
Marca todas las opciones que prefieras
¿Y en qué horario?
Marca todas las opciones que prefieras
Modalidad
Marca todas las opciones que prefieras